El cuidado de las uñas y cabello

¿A quién no le gusta lucir un cabello hermoso y uñas fuertes? Sin duda a todos. El problema es que muy pocas personas están conscientes de que, si bien hay muchos tratamientos para embellecerlos, los cuidados deben comenzar desde dentro.

Consejos para mejorar su apariencia

Las uñas y el cabello están compuestos de queratina, lo cual significa que los mismos alimentos que son buenos para el cabello también lo son para las uñas.

Muchas personas conocen que los ácidos grasos omega-3 del salmón, la macarela, las anchoas y las sardinas son benéficos para la salud en general, pero el organismo también aprovecha estos ácidos grasos para que el cabello se conserve brillante y abundante.

Hablando del cabello, las células que constituyen una hermosa cabellera dependen del zinc para funcionar al máximo. Los alimentos y actividades que incrementan el flujo o circulación sanguínea ayudan a llevar oxígeno y nutrientes a los folículos capilares.

En lo que se refiere al cuero cabelludo, la vitamina A (o beta caroteno), el hierro, el folato y la vitamina C se conjugan para mantenerlo humectado, al igual que el cabello. En realidad, el organismo convierte el beta caroteno en vitamina A para evitar que el cabello se torne seco y opaco; también favorece que las glándulas del cuero cabelludo produzcan un líquido oleoso llamado secreción sebácea.

Otras dos vitaminas B; ácido pantoténico (B5) y biotina tienen funciones importantes para el cabello, así que su deficiencia puede repercutir en la salud de éste o provocar su caída.

Proteína: más que combustible

La proteína proporciona los elementos básicos para el cabello y las uñas, por esa razón necesitan apoyo nutricional de proteínas “completas”, es decir, que contengan todos los aminoácidos esenciales.

La gelatina es considerada una proteína incompleta a la que le faltan uno o más aminoácidos esenciales.

Las deficiencias nutricionales

El cabello y las uñas son estructuras que se renuevan constantemente, por eso su crecimiento y regeneración se ven fácilmente afectados si hay déficits nutricionales.

La restricción de proteínas puede provocar que el crecimiento del cabello “descanse” y los cabellos viejos se caigan, dando lugar a una pérdida excesiva de éste.

Una dieta drásticamente restringida en calorías también puede ser otra causa de pérdida temporal del cabello, así como la deficiencia de hierro. Este importante nutriente se encuentra en cereales fortificados, granos y pastas, frijol de soya, lentejas y vegetales de hojas de color verde oscuro.

Cuidado del cabello y uñas

Las buenas condiciones del cabello y las uñas depende de muchos factores, y la nutrición es uno de ellos. Si bien nuestro ideal es llevar una dieta variada que nos permita darle a nuestro cuerpo los nutrientes que necesita, para muchos de nosotros es todo un reto, principalmente por falta de tiempo, y en ocasiones hasta por desconocimiento.

Fuente: holausana